20/2/08

Los seres humanos somos como islas.

Como estamos con poca actividad en el consultorio ( todavía siguen las vacaciones para muchos) estoy leyendo varios libros a la vez. ¿Y cual sería el tema o los temas que me desvelan? ; La psique de los humanos.

Algunos libros son de Jung, otros, de autores que siguen sus conceptos psicológicos, filosóficos, antropológicos , epistemológicos, con gran profundidad y que nos llevan a entender más y mejor nuestra vida cotidiana.

Así encuentro , que todos ellos se refieren al concepto del dolor psíquico.

Que no es un mal en sí mismo, pero que es una señal a la que debiéramos prestar atención.

Es un dolor confuso, a veces difuso, a veces desgarrador.

Es el dolor existencial que se manifiesta cuando nuestra psique se fragmenta y nos vemos privados del sentimiento de totalidad.

Miren ustedes que la palabra SANIDAD del latín sanus significa total.La Psicología , especialmente la analítica profunda nos ayuda a reconocer y conseguir la integración de las partes inconexas de nuestra psique para alcanzar el sentido de totalidad, que es a la vez salud y armonía.

Debemos mirar profunda y sutilmente los movimientos de la psique humana , que siempre está relacionada en un flujo continuo con toda la Naturaleza.

Física , del griego significa Naturaleza. Así si miramos hacia afuera a las fuerzas de la naturaleza, aprendemos también la dinámica de la psique humana.

En nuestra cultura occidental nos cuesta reconocernos como partes de la misma, como un pequeño fragmento del cosmos, del universo. La unidad con las plantas, los animales, el agua, el sol, los planetas , la tierra no la reconocemos, ni la respetamos y lo que es más lamentable con los OTROS, tan humanos como nosotros.

La mayoría de los libros de PSICOLOGÍA , nos enseñan teorías y abstracciones sobre la psique humana.Pero eso solamente no basta Hay que vivir, meterse en la profundidad de nosotros mismos, atender las señales del dolor , no ignorarlo ( a nadie le gusta sufrir) ni evitarlo, comprenderlo,amansarlo, hacerlo nuestro e intentar superarlo

Para ello debemos dedicarle un poco de tiempo , ya lo dice el refrán : Lo QUE AMAMOS ES AQUELLO PARA LO CUAL TENEMOS TIEMPO.

explorar el afuera, y explorar el adentro para descubrir la hermosa Naturaleza de nuestro mundo interior. La psique sufre, también se enferma , pero suele curarse a sí misma.

Y se estarán preguntando a qué viene todo esto y que relación hay con el título?: LOS SERES HUMANOS SOMOS COMO ISLAS.

En uno de sus libros Jung dice que los seres humanos son islas. ( lo recordé al leer un libro precioso de la Licenciada Mary Calvo : La complejidad de la vida. Dice Jung, que cada cual vive en su isla de diferente forma. Algunos se quedan en el interior y piensan que están seguros, otros se paran en el borde de la isla , pero como miran para adentro, sienten miedo , porque lo demás les parece complejo e inestable y se enferman neurotizan por el miedo. Otros se paran en el borde y miran todo el tiempo hacia afuera, esos se largan al abismo y se pierden en la nada.

Pero la verdad es que hay que pararse en el borde mismo de la isla y mirar un poco hacia afuera y mucho hacia adentro, al mismo tiempo. Este, decía Jung, es el desafío más difícil, pero más hermoso de nuestra vida. Hacia afuera y hacia adentro , para lograr lo que él sostiene como el fin de la psicoterapia: la armonía de los opuestos. El estar en línea . ¿Qué es arduo y trabajoso? claro que lo es. Pero ¿ quien les hizo creer que vivir es fácil y que debemos estar en continua felicidad?. No el desafío es estar más allá de la tan soñada felicidad.

13/2/08

EL SABER INTERIOR




EL SABER INTERIOR
QUE GUIA NUESTRA VIDA

Por Antonio LAS HERAS

Según los iniciados en vías tradicionales de conocimiento espiritual, es sólo hecho de pensar en algo ya crea la existencia de lo pensado en el mundo exterior. De esta manera, la realidad cotidiana no sería otra cosa que un efecto mismo del pensamiento humano. Así El Kybalion – uno de los libros herméticos orientales más difundidos en Occidente – asegura que “el Todo es mente; el Universo es mental”. Algunos filósofos e, inclusive, físicos modernos que trabajan en el universo intra atómico, han coincidido en esto al sostener que el tiempo sólo existe si hay un observador disponible. Prestigiosos investigadores universitarios, como el inglés Ruperlt Shaldrake, están convencidos de que todo cuanto ocurre a nuestro alrededor es provocado por la intervención de “campos” de naturaleza psíquica. También Carl Gustav Jung, a mediados del Siglo XX, expresó “finalmente nada ocurre en el mundo exterior que, previamente, no se encuentre preconfigurado en el psiquismo profundo personal.” De ser cierto (y estamos convencidos que lo es) significa que cada suceso que nos ocurre está, esencialmente, motivado en raíces psíquicas, la mayoría de ellas inaccesibles a la consciencia del protagonista. De manera tal que es el poder de la imaginación y la capacidad de fantasear lo que, finalmente, guía la vida de cada uno. Una sentencia del más puro esoterismo iniciático afirma: “Conoce a tu Ser Interno y conocerás a tu Señor”.
“La mente, como todos los elementos, puede ser trasmutada, - afirma también El Kybalion - de estado en estado, de grado en grado, de condición en condición, de polo a polo, de vibración a vibración”. “La verdadera trasmutación hermética es una práctica, un método, un arte mental”. “Trasmutar” es lograr un cambio en la naturaleza de la substancia, convirtiéndola en otra; implica transformación total. Por eso es que “el Universo mismo es una creación mental”.
La persona común, normal, sufre a diario por que su comprensión está limitada a apreciaciones producto de percepciones sensoriales. La gente supone que las cosas son de una única manera determinada, olvidando el sabio proverbio: “cada uno ve de acuerdo al color del cristal con que mira”. Por eso, cuando alguien afirma que su personalidad es de una determinada manera y que no puede modificarla para su progreso y su bien; en verdad se está engañando. Ya que si modifica sus esquemas de pensamiento conseguirá apreciar de un modo diferente la misma situación. Por eso podemos afirmar que no hay destino escrito, ni fatalidad prefijada. Todos somos artífices – como sostiene el poeta – de la historia que vivimos. Una fuerza oculta guía nuestra vida. Atesorada en lo profundo del psiquismo, del espíritu, del alma o del corazón; como se prefiera. Lo importante es que allí está. Aguardando que cada quien tome la decisión de aprovecharla. Ese es el momento en que se comienza a recorrer el real sendero de la vida, concebida como un desafío permanente. Es entonces cuando el discípulo se ha preparado y será capaz de encontrar al maestro que habrá de entrenarlo. Para ser artífice del propio destino sólo se requiere perseverancia, esfuerzo y creatividad permanente.



Dr. Antonio LAS HERAS
http://www.antoniolasheras.com.ar/
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Telefax: 4371 4788

Estamos de nuevo juntos.

Estoy acomodándome a la actividad normal, aunque cuesta un poco. Estuve en un SPA en Córdoba, La POSADA de QENTI ( en lengua de los Comechingones:colibríes)entre 350 hectáreas de sierras: viéndolas , disfrutándolas,junto a ese cielo tan hermoso.
Ejercicios y pileta e hidroterapia, descanso y paz. Todo sea por recuperarme un poco más de las secuelas del accidente.
Afortunada soy de haberlo podido hacer.
Desde luego estoy mejor,aunque debiera haberme quedado más tiempo.
Y feliz de poder comunicarme nuevamente con los que siguen este blog.
Justamente cuando seleccionaba algunos temas para subirlos, me llegó
un correo con un artículo Del Dr Antonio las Heras, presidente de A.J.A Asociación Junguiana Argentina,que quiero compartirlo con ustedes.
Interesante, profundo y¡QUE SINCRONICIDAD!en perfecta sintonía con alguna de las páginas que había estado seleccionando.
Léanlo, piénsenlo y medíténlo.
Gracias siempre y todo mi afecto para todos.
Tere