8/6/07

Los argentinos y los aportes de la Psicología Junguiana

Los argentinos conformamos siete diferentes grupos culturales y naturales, más los habitantes de la gran urbe que es Buenos Aires. Hay vastas zonas despobladas, mal comunicadas, encerradas en su mismidad y poco comprendidas. Desde la gran urbe que centraliza todo el poder económico y cultural, se intenta diseñar la forma, el estilo y las creencias de los otros. Y nos preguntamos, ¿ Cuáles son los aportes que la psicología Junguiana nos brinda para conocernos mejor, comprendernos y respetarnos?. Son innumerables. Solo nos acercaremos a una.

Nos dice que nuestra convivencia con los otros se hace a través de los pensamientos, sentimientos, percepciones e intuiciones de ese gran mandala que es la personalidad humana. Y que se hace fundamentalmente a través del espíritu?. y ¿Qué es el espíritu?

Es cuando se alude a algo que le sucede a uno y nos compromete realmente con lo que le sucede al otro, más allá de la spalabras. Nos ofrece en esta época de una cultura globalizada y occidental, que está no molesta, sino realmente enferma. La ausencia de valores fundantes, el quiebre de las instituciones, de modelos,el encumbramiento del éxito a cualquier precio, de lo económico, de la frivolidad, de modas pasajeras, nos llena de vacíos.
Y ¿ qué debemos buscar entonces? la cultura del espíritu. La búsqueda de lo profundo, del verdaero sentido de la vida, de la integración de los opuestos en los que nos debatimos individual u colectivamente. Nos ofrece el camino de la Individuación , el crecimiento, la aceptación de lo diferente , sin falsos y distorsionantes prejuicios. Aceptemos las diferencias que nos enriquecen y energizan, con amor y respeto. Que de todos se aprende.

Estas pequeñas reflexiones y algunas otras iremos degranando en este nuestro tiempo compartido y anímense a disentir o a asentir. A comunicarnos esde nuestra esencia humana.

2 comentarios:

Dulcinea dijo...

En este mundo de acelere, de correr continuamente ya que la vida nos lleva a esto, es bueno en medio de tanta locura, darse y darle un tiempo a los que queremos, poder parar y darse cuenta que todo pasa lo unico que permanece perenne es el afecto que construimos.

Dra. Teresita Faro dijo...

Gracias por tu opinión. Y es verdad que vivimos en una vorágine
y vértigo, que nos impide detenernos y mirara nuestra sombra y desde allí ver a los otros como iguales y no diferentes y ayudarnos y comprenderlos. Un abrazo, Teresita.